Dan Hooker, uno de los peleadores más constantes de la UFC desde su debut en 2014, reveló que estuvo a punto de aceptar una pelea en UFC Perth el 28 de septiembre. Sin embargo, una situación reciente lo hizo cambiar de idea. El neozelandés, actualmente en recuperación tras una cirugía en la mano, explicó que su molestia con la organización surgió durante la semana de UFC 317, cuando le negaron el ingreso al evento en Las Vegas. Hooker había viajado para apoyar a su compañero Kai Kara-France, pero fue retirado de la lista de invitados, lo que interpretó como una falta de respeto.
“Intentaron levantarme a las 7:30 de la mañana para una actividad del UFC, que en Nueva Zelanda eran las tres. No salí ni nada, pero no me voy a levantar a esa hora para cualquier cosa. Me quedé dormido y no fui, y cancelaron mis entradas para la pelea de Kai. ¿Voy a correr a pelear lesionado por una compañía que me saca de la lista después de que viajé hasta Las Vegas? No lo creo. Uno espera más respeto, después de todo lo que uno deja en la jaula. Pero está bien, si así es, entonces vamos a pelear bajo mis condiciones. No voy a romperme el lomo por una empresa que no me respeta», explicó inicialmente.

Y agregó: «Además, eso de las peleas a cinco asaltos… veinte mil dólares por diez minutos más es el tarifario. En qué mundo te pagan lo mismo por media hora que por quince minutos, con apenas un extra. Cuando trabajaba en la fábrica de cocinas, no me explotaban así. Si quieren que trabaje el doble, que paguen el doble”.