Jon Jones había aceptado inicialmente enfrentarse a Tom Aspinall, pero posteriormente se retractó y se retiró del combate. Esta información la dio a conocer Ariel Helwani, quien sugiere que la versión oficial del presidente de la UFC, Dana White, no incluyó todos los detalles de lo ocurrido.
Según Helwani, White afirmó que «A Jon Jones le ofrecieron el trato y lo aceptó», dando a entender un acuerdo firme. Sin embargo, la cuenta de Helwani, que se basa en la información proporcionada por White, omite un punto crucial: «el problema es que no te contó toda la historia». Helwani añade que White no reveló cómo Jones «se desdijo de su palabra», y que «Esa parte saldrá a la luz con el tiempo».

Este giro en los acontecimientos ha generado especulaciones sobre los motivos detrás de la decisión de Jones de no continuar con la pelea contra Aspinall. La situación apunta a detalles no revelados que podrían ofrecer una perspectiva diferente sobre el acuerdo inicial y la posterior retirada del luchador.