Merab Dvalishvili ha expresado su escepticismo sobre la elección de Umar Nurmagomedov como oponente para Cory Sandhagen en una próxima pelea de UFC. En sus declaraciones, cuestiona por qué Nurmagomedov está siendo considerado para enfrentar a Sandhagen en lugar de pelear contra otros luchadores menos rankeados, como Mario Bautista, o enfrentarse a oponentes más desafiantes dentro del top 15 de la división.
El argumento de Dvalishvili se basa en la falta de experiencia de Nurmagomedov contra oponentes de élite en la división de peso gallo de UFC. Señala que Nurmagomedov no ha tenido enfrentamientos con ningún peleador del top 15 hasta el momento, mientras que Sandhagen ha demostrado su valía al mantenerse en el top 10 durante un período prolongado. Dvalishvili también cuestiona la calidad de los oponentes anteriores de Nurmagomedov en UFC, insinuando que han sido menos competitivos y que algunos ni siquiera permanecen en la organización.
Merab Dvalishvili pone en duda las condiciones de Umar Nurmagomedov
El luchador georgiano pone en duda la validez de la oportunidad que se le está brindando a Nurmagomedov, señalando que él mismo no recibió una oportunidad similar después de enfrentarse a oponentes menos destacados. Esta perspectiva sugiere una discrepancia en el trato otorgado a los luchadores en función de su historial y reputación dentro de la UFC.
Las críticas de Dvalishvili plantean interrogantes legítimos sobre la justificación detrás de la elección de oponentes para peleadores emergentes como Nurmagomedov. Su opinión destaca la importancia de enfrentarse a rivales competitivos y de alto calibre para demostrar verdaderamente el mérito de ascender en la clasificación de la UFC y obtener oportunidades significativas en la división. En última instancia, estas declaraciones reflejan el debate constante dentro de las artes marciales mixtas sobre la equidad en la asignación de combates y las oportunidades para los luchadores en ascenso.